Comúnmente pensamos que las habilidades de manejo de dinero es algo que se aprende durante la adultez, pero en realidad es importante introducir la educación financiera a tus hijos durante una edad temprana. ¡Lee para averiguar por qué!
Enseñando el valor del dinero.
Es importante para los niños y jóvenes que entiendan el verdadero valor del dinero – esto ayuda a asegurar como tratan sus propias posesiones, al igual que la propiedad de otras personas; con respeto. Considere este ejemplo – con una pequeña mesada de unos cuantos pesos, tu hijo rápidamente entenderá cuánto vale su preciado teléfono o tablet al calcular cuánto se tardarían en ahorrar esa cantidad por sí mismos. Los niños y jóvenes que entienden el valor del dinero (al igual que el costo de los artículos) van a tener un aprecio más profundo hacia sus padres o sus proveedores.
Diversión con números.
Una de las formas más fáciles de demostrar los principios de las matemáticas (como las fracciones) es el usar dinero como un ejemplo. Cuatro cuartos son un peso porque los cuartos son 25 centavos, o veinticinco por ciento de un peso. Cuando los niños inician a sentirse cómodos al trabajar con una divisa, también estarán practicando habilidades de la vida real que podrán utilizar en su trabajo algún día. También alentamos a los padres a preguntarles a sus hijos que comparen precios cuando vayan de compras – esto es una gran forma de demostrar la importancia de la unidad de costos y cómo encontrar la mejor oferta.
Decisiones inteligentes sobre gastos.
Si su hijo ahorra su dinero y decide gastarlo en algo impulsivamente, este es en realidad un buen error que pueden cometer. Después de todo, el mejor periodo para aprender este tipo de lecciones financieras es durante una edad temprana cuando el juego es menor y en realidad no hay consecuencias a largo plazo. ¡Entonces, si su hijo desea hacer una compra impulsiva que reduce la mayoría de sus ahorros, déjelo hacerlo! Estas lecciones enseñan la importancia de ahorrar, manejar dinero, y lo más importante – vigilar nuestros hábitos de gastos.
Gastos universitarios.
No es un secreto que la universidad puede ser cara. Muchos estudiantes dependen de préstamos, becas, y subsidios para poder pagar la escuela. Es extremadamente importante para los estudiantes de preparatoria tener un asimiento firme sobre sus finanzas antes de ir a la universidad para poder hacer decisiones inteligentes a la hora de planear su camino a través de la educación superior. En esta época, no es poco común para los estudiantes sufrir de deudas universitarias entre la matrícula, su habitación y la comida. Los gastos universitarios deberían ser una decisión educada pensando en los pros y contras de la situación financiera, a la cual su objetivo lo llevará de una manera realista. Lo más importante; varias de las responsabilidades financieras relacionadas con la universidad de su estudiante pueden estar amarradas directamente a ellos personalmente. Aunque los préstamos parentales están definitivamente disponibles para ayudar a pagar la educación de su hijo, varias de las becas y subvenciones a los que los estudiantes aplican – incluyendo fondos gubernamentales – son típicamente distribuidos entre los estudiantes individuales. Entre libros de textos, pases de estacionamiento, y la matrícula, cada estudiante universitario debe de tener algún grado de educación financiera antes de hacer cualquier compromiso.
